
La función inicial de estos caballeros era la protección de los peregrinos que viajaban a Jerusalén, con el tiempo fueron cobrando importancia hasta llegar a ser selectivos en su reclutamiento por tratarse de uno de los ejércitos más armados y mejor entrenados de la edad media, incluso uno de los mejores en las cruzadas.
Y así, aumentando cada vez más en número y poder, los caballeros templarios lograron propiedades y un sinnúmero de tesoros esparcidos por todo el mundo, tesoros cuantiosos que son buscados con alta tecnología hoy en día.